GOBERNANTES Y GOBERNADOS

Me gustaría poder escribir lo mejor sobre el Perú.
Por ejemplo, que los gobernantes práctican con estusiasmo, lo que algunos psicologos denominan el método de la "escucha activa" Es decir, "sintonizar"con los anhelos de los gobernados, para tratar de comprender y satisfacer las necesidades de la población.
Que bueno sería que los gobernantes, cualquiera que fuese su nivel de responsabilidad, se preocuparan más por servir al país y estar muy atentos a los requerimientos de la ciudadanía.
Que los gobernantes, sólo deberían hacer lo que en realidad se necesita que hagan y no, lo que buena o malamente, ellos quieren o pretenden hacer.
Que las cosas que hacen, cuando es necesario hacerlas, las hicieran de la mejor manera.
Cómo me gustaría saber, que los problemas fundamentales como la pobreza, la educación, la salud y el trabajo han sido superados y en el caso de presentarse problemas, éstos se resolverán de inmediato, sin necesidad de utilizar ofensas, ni maltratar a nadie y todo el mundo lleno de contento.
Que bueno sería que la concertación, el diálogo y el mutuo respeto, constituyeran el mecanismo que facilite las relaciones entre los gobernantes y los gobernados del Perú.
Que formidable resultaría, si no se tratara de satanizar a los que no están de acuerdo, ni de imponer a sangre y fuego las decisiones gubernamentales, amparado en un equivocado principio de autoridad.
Todos podemos equivocarnos, pero por qué optar por la opción equivocada si tantas veces nos dicen que estamos bien, sólo, para después descubrir que algo anda mal.

MONUMENTOS HISTORICOS AL MEJOR POSTOR

Tenemos un problema como país.
Los que administran temporalmente la gestión pública, no pueden actuar, como si estuvieran dirigiendo una sociedad anónima, cuyo único propósito es obtener la máxima rentabilidad de la inversión.
Por eso, no puedo permanecer indiferente, por las cosas que estamos haciendo, o por lo menos, estamos permitiendo que otros hagan. La cosa no está clara o no la entiendo.
No se quién nos ha metido en la cabeza, que lo más conveniente para el desarrollo de un país, es establecer el marco legal que facilite la inversión privada, sin controles ni supervisiones y haga posible la venta de todo lo que se pueda vender y nada más.
Claro que si no se consigue vender; por lo menos, hay que buscar otra opción; por ejemplo, tratar de establecer concesiones y de esa manera generar ingresos, que después ya se verá en qué aplicar.
En esta ocasión, voy a referime al patrimonio monumental, que forma parte de la herencia cultural que hemos recibido de nuestros antepasados, y que corre peligro de pasar a manos privadas para su explotación comercial . Todo está dispuesto, inclusive ya existen, los mecanismos legales que estimulan ese tipo de acciones, como es el caso de la Ley 29164 que tiene como objetivo" establecer las condiciones que favorezcan y promocionen el desarrollo de la inversión privada".
No ha faltado, quien ha señalado que la ley evitará la depredación de monumentos históricos.
Sin embargo, a pesar de quienes defienden dicha norma, estoy convencido, que la ley será derogada. Creo, que la protesta del pueblo cuzqueño no caerá en saco roto y que las agresiones al patrimonio cultural serán repelidas por la ciudadanía y no por el INC que por el momento parece tener otras prioridades antes que la defensa de los monumentos históricos.Un patrimonio que responde a una cultura con más de cinco mil años de vigencia, no debe ser entregado al mejor postor.