sábado, 28 de junio de 2008

Una semana de difícil pronóstico

La próxima semana puede tener en el Perú muchas implicancias de carácter político.
Aunque no pretendemos ser aves de mal aguero, no se necesita ser muy perspicaz para darse cuenta, que por cualquier lugar donde se mire, durante ese lapso, siempre habrá un problema por resolver o una inquietud a la que no se le ha prestado la debida atención.
Por lo menos, los augurios no se presentan como los mejores. Los conflictos y paros están a la orden del día.
Una huelga minera, un paro agrario, una paralización de labores de los educadores que dependen del sector educación y también de lo docentes universitarios, así como protestas en el Callao y en diversos lugares del litoral, por la privatización de los puertos y la posible desaparición de la Empresa Nacional de Puertos.
Las cuotas de pesca que han aprobado las autoridades gubernamentales y que favorecen a las grandes empresas extractivas, con seguridad van a poner a los trabajadores del mar y a los pequeños y medianos empresarios del sector pesquero, en pie de lucha.
Si a eso unimos las protestas del pueblo de Ayacucho, por la presencia de tropas extranjeras en esa localidad, tenemos un panorama, que nos va a permitir constatar la capacidad de respuesta del gobierno para resolver los problemas sociales con sagacidad y tino y no con autoritarismo y palo como parece ser el sentir de un sector duro de los miembros del gobierno, así como de los empresarios que lo apoyan.

jueves, 26 de junio de 2008

El hombre que nunca aprendió de los refranes

Los refranes siempre han sido una muestra indudable de sabiduría popular.
Se repetían de generación en generación y su mensaje claro y oportuno nunca fue motivo de cuestionamiento, sino por el contrario suscitaba admiración, por su evidente sentido de veracidad y concordancia con la realidad. Pero lo que más llamaba la atención, era su permanente frescura y actualidad.
Sentencias como " En boca cerrada no entran moscas" o " No por mucho madrugar se amanece más temprano" o " Quien siembra vientos, cosecha tempestades", reflejan de manera directa, mensajes que constituyen inapelables verdades, que la gente de buen juicio respeta y acepta como muestra de un conocimiento simple y profundo que la modernidad no puede desterrar.
Sin embargo, llama la atención que personas que se supone gozan de grandes conocimientos y merecimientos de todo tipo, no tengan ninguna mesura, cuando se trata de hablar, pues hablan sin ninguna limitación y llegan a extremos increibles, tanto en ofrecimientos o aseveraciones que después resultan incapaces de cumplir.
En el Perú, el presidente García que nunca deja de sorprendernos, ha pedido a la población de las diferentes regiones del país, que si los presidentes regionales o los alcaldes no cumplen con hacer obra a pesar de contar con los recursos, se dirijan a sus casas para exigirles que se pongan a trabajar o que devuelvan el dinero al gobierno central , para que el ente gubernamental, se encargue de hacer los trabajos que resulten necesarios.
Me da la impresión que esa actitud triunfalista y amenazante puede generar muchos conflictos en el futuro, estoy seguro que el presidente García no ha tomado en cuenta la vieja conseja que señala, que quien siembra vientos cosecha tempestades.

martes, 24 de junio de 2008

PUTIS : HISTORIA DE DOLOR Y VERGUENZA

Putis es una historia que nos llena de dolor y vergüenza.
A pesar del tiempo transcurrido, el crimen es cada vez más evidente.
Los silencios oficiales y la falta de colaboración de las autoridades, para el señalamiento e identificación de los culpables, es una muestra más, de la poca voluntad que existe para terminar con la impunidad, mucha más notoria cuando se trata de delitos de lesa humanidad, cometidos por funciomarios oficiales.
Más de cien personas fueron asesinadas en Putis por efectivos del ejercito peruano, según todas las versiones disponibles y lo consignado por la Comisión de la Verdad y Reconciliación ( CVR). En el informe de la CVR, se precisa que en diciembre de 1984 un centenar de campesinos de diversos anexos de la comunidades de Putis, Cayramayo, Vizcatampata y Rodeo fueron ejecutados extrajudicialmente por militares destacados en Putis.
Los pobladores que se encontraban entre dos fuegos, por un lado Sendero Luminoso y otro el ejército, habían huido a las alturas abandonando sus casas, pero fueron convencidos de que iban a ser protegidos por los militares si regresaban a Putis.
De regreso a Putis se les pidió cavaran un terreno para la construcción de una piscigranja para la crianza de truchas. Cuando hubo finalizada esa tarea, los militares dispararon y dieron muerte a todos los que habían participado en la construcción de la fosa, inclusive a mujeres y niños, porque no querían que quedasen testigos.
Los campesinos fueron asesinados porque los militares suponían que eran senderistas y además por un propósito de lucro, para apoderarse del ganado que poseían esos pobladores y que después vendieron

domingo, 22 de junio de 2008

Una ausencia involuntaria

Durante las últimas semanas me fue imposible visitar Elogio de la Aguja y vaya que hubo una buena colección de temas, sobre los que pude escribir, pero por razones de carácter personal, estuve impedido de hacerlo.
La verdad, es que había tantas cosas sobre las que era posible escribir, que me resulta difícil, tratar de establecer una secuencia ordenada para desarrollar mis notas. Sin embargo, voy a tratar brevemente, algunos temas que creo no se deben dejar pasar, así como así.
Uno de estos, tiene que ver con las desafortunadas declaraciones del presidente García que dijo que si no le vendíamos gas a Chile, ellos podrían enojarse y dejar de comprarnos otros productos. Realmente es una verguenza que el primer mandatario se exprese en esa forma. Su afán de querer venderlo todo, como si hubiera sido elegido para rematar todo el patrimonio nacional es algo que me parece excesivo y que sus ministros y asesores deberían tratar de calmarlo para evitar la expresión de esos temores que después podrían resultar irreparables.
Los problemas con Moquegua han sido ocasionados por la falta de atención del ejecutivo. El haber disminuido el canón minero a Moquegua, fue una decisión y responsabilidad del ejecutivo.Las autoridades gubernamentales generaron el conflicto y debieron prestarle la debida atención para solucionarlo, en lugar de permitir que se hiciera inmanejable como si se tratara de responsabilidad de otro.
Que el problema se les haya ido de las manos y que la población haya tomado en rehenes a un general y un grupo de policias, es algo que debe investigarse, pero no es motivo para que el presidente Garcia, acuse de cobarde al general Jordán, porque no procedió con mano dura, o por que pidió perdón a la población por una violencia policial que él, no había autorizado y que seguro consideraba innecesaria .
Hay otros temas para seguir escribiendo y así lo haremos en los próximos días.